- El artista gaditano de ascendencia irlandesa, quien asegura que al público de Valladolid hay que ganárselo cada día, presentará la gala de inauguración de esta 65 Seminci
Recientemente usted decía que iba siendo momento de repetir en Seminci. Y aquí estará…
Es increíble, voy a tener que decir en voz alta más cosas que me apetecen. Jajaja.
Es su tercera vez como maestro de ceremonias de la gala inaugural. ¿Siente que se ha metido ya en el bolsillo al público de Valladolid? ¿Ha pensando en lo que le gustaría hacer en la apertura de la 65 Semana?
Al público de Valladolid hay que ganárselo cada día, aunque no te voy a negar que ya se notan los más de 20 años que llevo asistiendo a Valladolid con cada espectáculo que he hecho, y el público siempre me ha respondido muy bien. Lo nuestro se puede decir que ya es una relación consolidada.
Con respecto a lo que haré en la gala, hay una idea muy chula, que espero poder rellenar con más ideas, y hacer otra gala para el recuerdo. Desde luego que especial va a ser, por las circunstancias que estamos viviendo, así que trataremos de aprovechar eso en nuestro favor… y hasta ahí puedo leer.
¿Podría decir que es experto ya en cine de autor? ¿Qué papel considera que tiene que tener este género dentro de la industria?
Jaja. Hombre, no tanto como experto, pero desde luego ya sé un poquito… Creo que es un género fundamental y necesario. No todo puede ser cine comercial, tiene que haber de todo, por eso la Seminci es imprescindible. Aquí se han descubierto grandes autores, y espero que siga sucediendo.
Comparta algún recuerdo de su relación con el cine a lo largo de su vida…
Tengo muchos recuerdos relacionados con el cine, aunque me gustaría tener muchos más. Desde luego que siempre se me viene a la cabeza mi primera película, El Factor Pilgrim, de Alberto Rodríguez y Santi Amodeo, y cómo la filmamos, de una manera absolutamente independiente 8 amigos en Londres, en 21 días… Muy salvaje.
Es usted actor y músico, colaborador en medios de comunicación, pero además cocina y compone bandas sonoras. Lo que se dice un artista polifacético. ¿Qué más le gustaría hacer?
Me gustaría escribir. Ahora estoy muy centrado en escribir un par de series y una película. A ver qué sale de ahí… De momento tengo ilusión y un ordenador, que para empezar no está mal.
Seguro que sus distintas facetas no le dejarán parar… cuéntenos sus próximos proyectos.
De momento sigo con mi recién estrenado espectáculo Imbécil, que ya lo traje a Valladolid, por supuesto, y tratando de sacarlo adelante en estas condiciones tan adversas que nos ha dejado esta maldita pandemia. Sigo sacando nuevas canciones con La Bizarrería, y como te dije, escribiendo mis proyectos, a ver si consigo sacarlos adelante. También estamos pendientes de conocer la fecha de rodaje de la peli de Camera Café, que espero que sea pronto.
La televisión le ha dado parte de la fama de la que goza. ¿En qué puesto sitúa ahora su interés por la pequeña pantalla?
Pues lo sitúo bastante alto. No le doy menos importancia que al cine. Recuerdo que cuando empecé en esto, hacer televisión estaba muy mal visto para hacer cine, y ahora casi todo lo contrario. A mí la tele me ha dado muchísimo, y estoy loco por volver, sinceramente.
Viaja por los teatros de España con Imbécil. ¿Tiene que medir mucho las palabras cuando le preguntan por la situación que atraviesa la cultura en este tiempo?
Desafortunadamente es así para todo, hay que medir mucho las palabras últimamente. En todo, para todo, es terrorífico. Pero para eso he hecho este espectáculo, para que nos demos cuenta de que tenemos que ser un poco más libres a la hora de opinar o hacer un chiste, y menos tiquis miquis a la hora de recibirlos.
